Como ya se ha dicho, muchas veces ocurre de forma espontánea sin razón ni causa aparente, debido a una estimulación del nervio vago.
Sin embargo, otras veces aparece por una irritación del músculo diafragmático. Esta irritación puede tener distintas causas; la más común es debida a comer mucho o demasiado rápido, a una irritación estomacal, tomar bebidas alcohólicas o simplemente el nerviosismo o ansiedad.
Aunque es muy extraordinario, también se puede deber a alguna patología más grave como una insuficiencia duodenal o un ACV.
De la misma forma, el hipo es habitual en pacientes operados recientemente de cirugía abdominal o torácica.
Si persiste en el tiempo, se puede cronificar y dar lugar a una patología en sí misma, conocida como singulto, que debe ser valorada por especialistas para tratarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario